Muchas veces preparamos un pescado grande al horno y sobra la mitad… esta es una receta de aprovechamiento, en la que podemos utilizar los restos de un pescado asado y hacer de unas sobras un plato nuevo y original, con ingredientes muy baratos.
Si prefieres lo puedes hacer con pescado fresco o con lomos de pescado congelado.
Se puede tomar caliente o frío y simplemente acompañado de una ensalada resuelve perfectamente una cena de verano.
En este caso, lo hice para llevarlo a una excursión, acompañado de unos pimientos del piquillo y limones envueltos en una gasa, para protegerlos de los insectos. Llevé una mayonesa aparte y a todo el mundo le encantó.
Es una plato francamente barato y muy resultón.
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